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miércoles, 19 de agosto de 2020

Emérito

 

 

No voy a entrar en los supuestos meritos políticos del rey emérito durante la Transición española. Solo diré que no solo fue merito suyo que aquí no se diera otra guerra civil. Hubo más gente implicada y muchos ciudadanos anónimos que con su presencia en la calle apoyaron el proceso.

Hoy se ha publicado una carta firmada por setenta prohombres, (utilizo solo esta palabra porque en la RAE no existe la palabra “promujer” ni ninguna otra con la misma definición de prohombre) hombres y mujeres, defendiendo los meritos del rey emérito. Todos esos prohombres, insisto, hombres y mujeres, son los mismos que durante décadas han mirado para otro lado mientras el monarca en ejercicio se enriquecía en su función de comisionista principalmente de países árabes, algo que entra en contradicción con su función de jefe de estado.

Se ha dicho que es que los árabes tienen la costumbre de “regalar” dineros, Ferraris, yates, apartamentos de lujo y demás cosas fuera del alcance de los ciudadanos corrientes que vivimos o malvivimos con el fruto de nuestro trabajo cuándo lo tenemos. De acuerdo, pero esos regalos, todos, se tenían que haber puesto a disposición de Patrimonio Nacional, pero ¿Por qué los Ferraris y los yates si, y los dineros y los apartamentos de lujo no?

En el escrito, sobre el emérito dicen: "Heredero de los poderes autoritarios de la dictadura del general Franco, el rey Juan Carlos hizo saber al poco de acceder al trono su voluntad explícita de renunciar a los mismos para propiciar la organización institucional española de acuerdo con el modelo de las democracias occidentales. Don Juan Carlos se comprometió a ser el rey de todos los españoles y pronto se consiguió una España sin exiliados y la superación de las cuestiones que nos habían enfrentado en la historia reciente".

Y siguen insistiendo sobre el mismo argumento: "la Monarquía parlamentaria, así como el conjunto de la Constitución de 1978, han propiciado una España moderna, con un sistema político, económico y social avanzado fraguado en la libertad, en la justicia y en la solidaridad".

Para zanjar: "No se podrá borrar la labor de Juan Carlos I".

Estos prohombres, (hombres y mujeres) parece que piensan que todos estos supuestos meritos del emérito tapan toda la mierda que esta saliendo a la luz últimamente gracias a la investigación de los fiscales suizos, y no, no los tapan. Porque por detrás de todos esos meritos, está también esa labor de lobista que llevó a cabo al mismo tiempo, es decir, se aprovechó de su cargo de jefe de estado para enriquecerse a costa de los españoles que en definitiva son los que pagan los sobrecostes de los contratos. Pero en todo caso, una cosa es su acción política y otra muy distinta su presunta acción corrupta, aunque insisto, yo personalmente no lo puedo separar.

La manoseada “presunción de inocencia” es a los que siempre se agarran los presuntos y no tan presuntos corruptos de este país para no dar explicaciones y dilatar unos procesos judiciales hechos a su medida. El emérito tiene que dar explicaciones de sus actos ya, porque su figura no está sujeta al escrutinio de las urnas, y si tanto quiere a la institución monárquica y a este país cómo dice, es lo mejor que puede hacer para echar una mano a su heredero.

De todas maneras, es casi mejor que no lo haga para que la monarquía termine de pudrirse y desaparezca de este país dando paso a una República dónde todos podamos elegir al jefe del estado.